Los inversores castigaron la fuerte caída de las suscripciones a Disney+, su principal plataforma de streaming y una de sus grandes apuestas de los últimos años.
Wall Street cerró este jueves en territorio mixto y el Dow Jones de Industriales encadenó su cuarto día en rojo, con un retroceso del 0,66 % y lastrado por una fuerte caída de Disney, mientras que el tecnológico Nasdaq acabó en positivo una sesión en la que volvieron los temores en torno a la banca regional.
Al cierre de las operaciones en Nueva York, el Dow Jones se situó en 33.309,51 puntos, mientras que el selectivo S&P 500 se dejó un 0,17 %, hasta 4.130,62.
Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan las principales tecnológicas, subió un 0,18 % y terminó en 12.328,51 unidades.
El Dow Jones, que integra a treinta grandes compañías estadounidenses, se vio arrastrado por Disney, que se hundió un 8,70 % tras presentar sus cuentas más recientes.
Aunque el gigante del entretenimiento vio crecer sus beneficios en los últimos meses, los inversores castigaron la fuerte caída de las suscripciones a Disney+, su principal plataforma de streaming y una de sus grandes apuestas de los últimos años.
La empresa también dijo que se anotará una pérdida contable de entre 1.500 y 1.800 millones de dólares vinculada a la retirada de títulos.
También se anotaron pérdidas notables otras empresas como Intel (-3,70 %) o Dow (-2,08 %), mientras que solo media docena de valores en ese listado acabaron en positivo, encabezados por Coca-Cola (0,57 %), Boeing (0,50 %) y Walmart (0,37 %).
La jornada deparó además nuevas caídas para algunos bancos regionales estadounidenses que en las últimas semanas han sufrido en los mercados, sobre todo el californiano PacWest, que se desplomó más de un 22 % tras revelar que durante la semana pasada sufrió nuevas salidas de depósitos.
El banco dijo que sus depósitos se redujeron en un 9,5 % durante la primera semana de mayo, con el grueso de las salidas entre los días 4 y 5 como consecuencias de informaciones de prensa que apuntaban que estaba estudiando opciones, incluida una posible venta.
Su caída terminó por afectar también, aunque mucho menos, a otras entidades que han estado en el punto de mira de los inversores como Zions (-4,51 %) y Western Alliance (-2,07 %).
Los inversores digirieron hoy nuevos datos sobre la economía estadounidense, que la semana pasada vio un aumento de la cifra semanal de solicitudes del subsidio por desempleo a 264.000, es decir 22.000 más que en la anterior.
También un nuevo dato de los precios de producción, que subieron en abril sólo un 0,2 % con respecto al mes anterior.
Las cifras de hoy no depararon grandes sorpresas y se situaron prácticamente en línea con lo que esperaban los analistas, que en general creen que los precios se irán controlando a medida que se normaliza la cadena de suministro y que la demanda laboral bajará con las subidas de las tasas de interés.
En otros mercados, el petróleo de Texas bajó un 2,3 % y cerró en 70,87 dólares el barril, y al término de la sesión bursátil el oro retrocedía a 2.019,4 dólares la onza, la rentabilidad del bono estadounidense a diez años bajaba al 3,379 % y el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,091.