Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de la Violencia, señala que Venezuela pasó a ser el segundo país con más criminalidad de la región después de Honduras.
La cifra de muertes violentas en Venezuela se estancó entre 2021 y 2022, cuando registró 10.737, según un reporte presentado por la ONG Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), que sirve de referencia ante la falta de estadísticas oficiales.
Son 344 menos que en 2021, que reportó 11.081 personas fallecidas por causas violentas, según este estudio que se basa principalmente en casos publicados en la prensa.
«No hubo grandes variaciones», explicó el director del OVV, Roberto Briceño León, durante la presentación virtual de este informe, que coloca de cualquier forma al país caribeño como uno de los más violentos de América Latina, con unas 26 muertes diarias.
«La estimación que podemos hacer es que está en el segundo lugar, detrás de Honduras, pero eso dependerá de los resultados definitivos de Honduras», señaló Briceño.
Venezuela venía registrando una importante disminución en la violencia desde 2016 cuando hubo 28.479 muertes violentas, en medio de la masiva migración, la profunda crisis económica y la pandemia de covid.
La dolarización incentiva el crimen
Pero esa tendencia «se detuvo» este año empujada por las «oportunidades» que ha encontrado el crimen ante la dolarización de facto que rige en el país, las remesas familiares, la minería, «el lavado de dinero y la droga», indicó el experto.
Hubo además este año un cambio en la «composición interna en la clasificación de las muertes violentas»: se redujeron los homicidios, de 3.112 en 2021 a 2.328, así como los fallecimientos a manos de policía, que cayeron a 1.240 después de registrar 2.332 el año pasado.
El OVV destaca no obstante la categoría denominada «muertes en averiguación», que llegaron a 5.799 (+45%), en la que caben homicidios o víctimas de la policía.
«La suma de los casos de homicidios y las muertes por intervención policial suman 3.568 víctimas, mientras que las víctimas cuya causa de muerte se encuentra ‘en averiguación’ sumaron 5.799, casi el doble. Esta categoría reúne el 62% de las muertes violentas», indicó.
Las desapariciones -1.790- se cuentan dentro del total de muertes violentas.
El observatorio, con presencia en todo el país, advirtió igualmente sobre un «incremento» en los robos, secuestros y extorsiones.